Exposición "Paraiso Perdido" de Pedro Avellaneda_

Galería Léucade se complace en invitarte a la inauguración de la exposición "Paraíso perdido" de uno de los grandes artistas de la Región de Murcia: Pedro Avellaneda. A sus 85 años, este pintor de Cieza (que fue un gran maestro de Manuel Avellaneda) no ha dejado de pintar. No te pierdas esta veintena de óleos sobre lienzo y algunas de sus acuarelas.

Será el jueves 5 de noviembre a las 20:30 y contaremos con la presencia del artista. Podrás disfrutar de la exposición hasta el 3 de Diciembre.

“Ciudades sin respuesta, ríos sin habla, cumbres sin ecos…” Estos versos del poema “Paraíso perdido” podrían describir algunas de las obras de esta exposición individual de Avellaneda. Pedro Avellaneda (Cieza, 1930), es uno de los artistas más relevantes de la Región de Murcia. La exposición está compuesta por una veintena de óleos sobre lienzo y algunas acuarelas. A sus 85 años, Pedro Avellaneda sigue con la vitalidad de una persona tan creativa e interesada en las diferentes artes, ya que a pesar de hacernos sentir a través de sus pinturas, es un ávido lector de poesía y así lo refleja en algunas de sus obras.

Apasionado de Baudelaire, quién decía en su poema paisajes: “estaré gozando la voluptuosidad, de que la Primavera a mi capricho irrumpa, de hacer que se alce un sol en mi pecho, y crear una atmósfera tierna de mis ideas quemantes”, y eso hace Avellaneda en sus paisajes, algunos de ellos reflejando el recuerdo de sus salidas al río, o de los maravillosos colores que nacen en su tierra con árboles que florecen en gamas de infinitos tonos grabados en obras impresionistas; otros paisajes en cambio, más expresionistas, son resultados de sueños, en los que incluso experimenta con la abstracción, y nos muestra que Avellaneda siempre destacará como gran artista y gran maestro, pero sin que sus discípulos encontraran nunca tantos colores escondidos en su paleta.
En sus árboles, seguimos las ramas como si se trataran de un camino que nos llevara a un lugar secreto en el que adentrarnos en la obra y sentir el olor de las hojas, y si nos fijamos detenidamente, podemos ver sobre ellas la mano experimentada del artista acariciándolas con su pincel.

COMENTARIOS